17 de agosto de 2012: En la actualidad, es noticia del pasado que el vehículo explorador de la NASA, llamado Curiosity (Curiosidad, en idioma español), se encuentra a salvo sobre la superficie del Planeta Rojo, tras realizar un temerario amartizaje que dejó a la nación entera sin aliento. Ahora, los científicos de la misión están ansiosos, esperando que el explorador comience a moverse. Con tan "exquisito" conjunto de ruedas a su disposición, y un camino libre de obstáculos, ¿hacia donde deberían ir primero?
"No tendremos que viajar demasiado lejos para encontrar cosas excitantes", comenta el científico del proyecto, John Grotzinger. "Nos hemos posado en la mejor zona posible dentro del área predeterminada: la parte baja de una zona aluvial".
El nuevo video de ScienceCast explora los lugares a los cuales Curiosity podría dirigirse. [Reproducir el video].
Una zona aluvial es un patrón formado por sedimentos rocosos, polvo y arena, depositados por el flujo de masas de agua (en este caso, quizás un antiguo río marciano). Ya que la vida, tal como la conocemos, requiere de agua líquida, la zona representa un punto estupendo para comenzar la búsqueda de claves de un Marte que tal vez en algún momento exhibió condiciones favorables para la vida.
"Asimismo, la zona aluvial indica que fluyó agua a través de la superficie en el pasado, de modo que nos dirigiremos cuesta abajo, hacia donde el agua podría haberse acumulado. Buscaremos minerales, como sales, que nos podrían indicar los lugares en los cuales el agua ha estado. Es algo así como la búsqueda de un tesoro, sólo que en este caso los minerales desempeñan el papel de las pistas".
"No tendremos que viajar demasiado lejos para encontrar cosas excitantes", comenta el científico del proyecto, John Grotzinger. "Nos hemos posado en la mejor zona posible dentro del área predeterminada: la parte baja de una zona aluvial".
El nuevo video de ScienceCast explora los lugares a los cuales Curiosity podría dirigirse. [Reproducir el video].
Una zona aluvial es un patrón formado por sedimentos rocosos, polvo y arena, depositados por el flujo de masas de agua (en este caso, quizás un antiguo río marciano). Ya que la vida, tal como la conocemos, requiere de agua líquida, la zona representa un punto estupendo para comenzar la búsqueda de claves de un Marte que tal vez en algún momento exhibió condiciones favorables para la vida.
"Asimismo, la zona aluvial indica que fluyó agua a través de la superficie en el pasado, de modo que nos dirigiremos cuesta abajo, hacia donde el agua podría haberse acumulado. Buscaremos minerales, como sales, que nos podrían indicar los lugares en los cuales el agua ha estado. Es algo así como la búsqueda de un tesoro, sólo que en este caso los minerales desempeñan el papel de las pistas".
Esta imagen muestra los sitios que los científicos desean que el vehículo explorador investigue. Primero, Curiosity se desplazará hacia un área apodada Glenelg, en donde se conjugan tres tipos distintos de suelo. El equipo científico pensó que el nombre era apropiado ya que, si Curiosity viaja hacia tal punto, lo visitaría de hecho dos veces (una de ida y otra de vuelta), como la lectura de la palabra Glenelg, que es un palíndromo. Posteriormente, Curiosity se dirigirá hacia la base del Monte Agudo (Mount Sharp, en idioma inglés), en donde un "descanso" en la región de dunas naturales debería permitirle comenzar a escalar las zonas más bajas de la montaña. [Imagen ampliada].
Después de esta escala, agrega Grotzinger, "la marcha será a toda máquina" (a máxima velocidad) hasta la base del Monte Agudo (Mount Sharp, en idioma inglés), una montaña de 5.000 metros de alto que guarda, entre sus antiguas capas y estratos, posibles claves para la vida en el Planeta Rojo.
"Entre nosotros, tendremos que llegar a un acuerdo para no detenernos demasiadas veces durante el camino. El Monte Agudo es la razón por la cual elegimos esta zona para aterrizar, de modo que debemos establecer que llegar allí es una prioridad".
Richard Cook, quien es el director adjunto del programa, describe la tentación de pararse a lo largo del camino: "Será como salir de vacaciones en familia pero, en lugar de la familia, tendremos a 400 científicos deseosos de detenerse y observar cada detalle del paisaje".
Curiosity está dotado de instrumentos específicamente diseñados para la búsqueda de los elementos esenciales para la vida.
Un láser localizado en el mástil de Curiosity es capaz de apuntar hacia rocas que pueden resultar interesantes y vaporizar pequeños fragmentos de ellas, desde una distancia de hasta 7 metros. Los micro-pulsos del láser producen nubes de plasma y los científicos pueden analizar la luz reflejada de tales nubes con el fin de conocer cuál es su composición. El mástil también porta una cámara de alta resolución, llamada Mastcam, la cual ya ha comenzado a observar y a fotografiar los alrededores del vehículo explorador.
Además, el brazo robot del vehículo explorador posee su propio conjunto de instrumentos. El Espectrómetro de Rayos X de Partículas Alfa (Alpha Particle X-Ray Spectrometer, en idioma inglés) medirá la abundancia de elementos químicos en el polvo, así como en el suelo, en las rocas y en las muestras que el explorador recoja. La Cámara para Imágenes con Magnificación en Marte (Mars Hand Lens Imager, en idioma inglés) actúa como si fuera una "lupa de geólogo" que puede tomar sus propias imágenes a color.
Al final, las muestras tomadas serán enviadas a un par de instrumentos de laboratorio ubicados a bordo del vehículo explorador. Uno de tales instrumentos, denominado SAM, que es el acrónimo de "Análisis de Muestras en Marte" (Sample Analysis at Mars, en idioma inglés), explorará el Planeta Rojo "olfateando" el aire, al estilo de un sabueso. El aparato descripto posee rejillas de ventilación que se abren hacia la atmósfera marciana para detectar gases como el metano. SAM también puede "olfatear" los gases liberados por las muestras de suelo o de rocas que calienta en su propio horno.
¿Podrán 400 científicos envueltos en la emoción de las más grandiosas "vacaciones familiares" realmente apresurarse para llegar a destino sin detenerse a "saborear" cada detalle del terreno?
Después de esta escala, agrega Grotzinger, "la marcha será a toda máquina" (a máxima velocidad) hasta la base del Monte Agudo (Mount Sharp, en idioma inglés), una montaña de 5.000 metros de alto que guarda, entre sus antiguas capas y estratos, posibles claves para la vida en el Planeta Rojo.
"Entre nosotros, tendremos que llegar a un acuerdo para no detenernos demasiadas veces durante el camino. El Monte Agudo es la razón por la cual elegimos esta zona para aterrizar, de modo que debemos establecer que llegar allí es una prioridad".
Richard Cook, quien es el director adjunto del programa, describe la tentación de pararse a lo largo del camino: "Será como salir de vacaciones en familia pero, en lugar de la familia, tendremos a 400 científicos deseosos de detenerse y observar cada detalle del paisaje".
Curiosity está dotado de instrumentos específicamente diseñados para la búsqueda de los elementos esenciales para la vida.
Un láser localizado en el mástil de Curiosity es capaz de apuntar hacia rocas que pueden resultar interesantes y vaporizar pequeños fragmentos de ellas, desde una distancia de hasta 7 metros. Los micro-pulsos del láser producen nubes de plasma y los científicos pueden analizar la luz reflejada de tales nubes con el fin de conocer cuál es su composición. El mástil también porta una cámara de alta resolución, llamada Mastcam, la cual ya ha comenzado a observar y a fotografiar los alrededores del vehículo explorador.
Además, el brazo robot del vehículo explorador posee su propio conjunto de instrumentos. El Espectrómetro de Rayos X de Partículas Alfa (Alpha Particle X-Ray Spectrometer, en idioma inglés) medirá la abundancia de elementos químicos en el polvo, así como en el suelo, en las rocas y en las muestras que el explorador recoja. La Cámara para Imágenes con Magnificación en Marte (Mars Hand Lens Imager, en idioma inglés) actúa como si fuera una "lupa de geólogo" que puede tomar sus propias imágenes a color.
Al final, las muestras tomadas serán enviadas a un par de instrumentos de laboratorio ubicados a bordo del vehículo explorador. Uno de tales instrumentos, denominado SAM, que es el acrónimo de "Análisis de Muestras en Marte" (Sample Analysis at Mars, en idioma inglés), explorará el Planeta Rojo "olfateando" el aire, al estilo de un sabueso. El aparato descripto posee rejillas de ventilación que se abren hacia la atmósfera marciana para detectar gases como el metano. SAM también puede "olfatear" los gases liberados por las muestras de suelo o de rocas que calienta en su propio horno.
¿Podrán 400 científicos envueltos en la emoción de las más grandiosas "vacaciones familiares" realmente apresurarse para llegar a destino sin detenerse a "saborear" cada detalle del terreno?