De modo comparable a la táctica militar de provocar
interferencias que impidan a los radares enemigos captar los aviones que
se acercan a su territorio, ciertas polillas, en la escalada
armamentística que vienen sosteniendo contra sus enemigos los
murciélagos durante una larga etapa de la historia de la evolución, son
capaces de generar pulsos ultrasónicos en reacción a los chillidos
ultrasónicos que emiten sus depredadores los murciélagos a modo de sónar
para localizar polillas y otras presas potenciales. Al parecer, estos
pulsos ultrasónicos de las polillas son un mecanismo de autodefensa para
sabotear los intentos de ecolocalización de los murciélagos que les
acechan.
Ya se sabía que ciertas polillas, de la familia Arctiidae, popularmente conocidas como polillas tigre, usan el ultrasonido como mecanismo de defensa. Ahora, el equipo de Akito Kawahara, del Museo de Historia Natural, ubicado en el campus de la Universidad de Florida, Estados Unidos, ha comprobado que machos y hembras de por lo menos tres especies de polillas de la familia Sphingidae producen ultrasonidos.
Los investigadores creen que las polillas de la familia Sphingidae emiten ultrasonidos como una defensa física, quizá para advertir a sus congéneres cercanos de la presencia de murciélagos, o más probablemente para sabotear los intentos de ecolocalización de los murciélagos, causando en estos un nivel de confusión lo bastante grande acerca de las señales captadas como para impedirles identificar como tales a las hábiles polillas o evitar que averigüen su ubicación real.
Ya se sabía que ciertas polillas, de la familia Arctiidae, popularmente conocidas como polillas tigre, usan el ultrasonido como mecanismo de defensa. Ahora, el equipo de Akito Kawahara, del Museo de Historia Natural, ubicado en el campus de la Universidad de Florida, Estados Unidos, ha comprobado que machos y hembras de por lo menos tres especies de polillas de la familia Sphingidae producen ultrasonidos.
Los investigadores creen que las polillas de la familia Sphingidae emiten ultrasonidos como una defensa física, quizá para advertir a sus congéneres cercanos de la presencia de murciélagos, o más probablemente para sabotear los intentos de ecolocalización de los murciélagos, causando en estos un nivel de confusión lo bastante grande acerca de las señales captadas como para impedirles identificar como tales a las hábiles polillas o evitar que averigüen su ubicación real.
Este estudio fue llevado a cabo en Malasia, que tiene la mayor biodiversidad de polillas de la familia Sphingidae de todo el planeta. Kawahara también condujo investigaciones en la selva de Borneo y en la parte baja del río Amazonas.
Las polillas de la familia Sphingidae están entre los insectos voladores más rápidos y eficientes, y hay más de 1.400 especies en todo el mundo.
El equipo de Kawahara cree que las polillas de la familia Sphingidae son una fuente de alimento muy deseada por los murciélagos porque ninguna de ellas parece estar químicamente protegida. De ahí la dirección evolutiva de estas polillas hacia la capacidad de engañar con ultrasonidos a los murciélagos.